Un año más las 24 Horas de Daytona abren la temporada 2018 del motorsport. Este año, a diferencia de temporadas anteriores, la prueba americana logra el interés mediático que se merece. Y todo, o en gran parte, a la participación de Fernando Alonso. Y es que igual que ocurriera en mayo con las 500 Millas de Indianápolis, el bicampeón de F1 -indirectamente- vuelve a convertir una competición con escaso seguimiento en España en una de las citas de este año.
Pero, ¿qué son las 24 Horas de Daytona? ¿Es como Le Mans pero a la americana? Ni sí, ni no. Cierto es que la competición dura 24 horas y participan diferentes categorías, pero Daytona tiene sus particularidades. Por su circuito mixto y por la potencia de sus vehículos, algo menor que en la prueba de Francia. Si Alonso te acerca las 24 Horas de Daytona, en Camino a Boxes te llevamos a conocer los puntos clave qué debes conocer antes de que se apaguen los semáforos.
Las 24 Horas de Daytona, prueba de resistencia por excelencia
Es una de las citas de resistencia más importantes del motorsport. Cita ineludible y organizada por la NASCAR, la prueba de Florida abre la temporada del IMSA Weather Tech SportsCar Championship, un campeonato que cuenta con pruebas de renombre tan internacional como Petit Le Mans, las 12 Horas de Sebring o las 6 Horas de Watkins Glen, entre otras. Aunque aquí, hasta el momento, no ha sido una prueba ‘mediática’, la situación cambia en Estados Unidos ya que ¡hasta 168.000 espectadores llenan las gradas del circuito! Se dice pronto, ¿verdad?
En Daytona ganan los pilotos experimentados. Aquellos que llevan años compitiendo en esta prueba. Aquellos que saben cómo mediar entre el óvalo y la zona de curvas. Los que entienden sus entresijos. En definitiva, aquellos que conocen la dificultad del trazado.
Circuito mixto
La prueba se disputa en el Daytona International Speedway, en un trazado de 5,7 kilómetros. El circuito está formado por un óvalo y una chicane en mitad de la contrarecta que acaba en la primera curva, para empezar una nueva vuelta. Aquí, los pilotos se dirigen a un trazado interior, poco qué ver con el óvalo americano. Esta parte, de 6 curvas, se asemeja a un trazado de Fórmula 1, uniendo curvas y pequeñas rectas que les llevan, de nuevo, al gran óvalo y hacia la primera curva. Por si fuera poco, se añade un nuevo reto: la inclinación. El óvalo de Daytona es un Super Speedway, lo que le hace tener un mayor ángulo de inclinación, concretamente de 31 grados.
Categorías y coches participantes
Este año, la prueba se divide en tres categorías: Prototipos, GTLM (GT Le Mans) y GTD (GT Daytona)
Prototype
Aquí compiten los vehículos más rápidos de la carrera y los que lucharán por la victoria absoluta. En esta categoría participan tanto los Daytona Prototype International (DPI) como los LMP2 homologados. En los DPI participan los grandes fabricantes con prototipos basados en un LMP2 pero a los que montan su propio motor y les hacen pequeños ajustes en la carrocería. Junto a ellos, los LMP2 homologados y que montan motor Gibson GK428 de 4.2 litros.
Y te preguntarás, ¿por qué esta unión de coches? Muy fácil: la organización quiere mantener la esencia de los prototipos Daytona al tiempo que facilita la llegada de nuevos equipos y pilotos con un vehículo más estándar y que, a la vez, puedan participar en las próximas 24 Horas de Le Mans. Para estos últimos, participar en la prueba de Daytona es un buen ‘entrenamiento’ antes de que arranquen las competiciones europeas.
GT Le Mans (GTLM)
Es la categoría más profesional de la prueba. Y es que aquí todos los pilotos que compiten son pilotos de fábrica. Es decir, encontramos las grandes marcas que reinan en las competiciones de resistencia. Porsche, Ferrari, Ford, o Chevrolet y BMW participan en esta categoría con versiones derivadas de sus mejores turismos de resistencia: el Porsche 911 RSR, el Ferrari 488, el Ford GT o el Chevrolet Corvette C7.R)
GT Daytona (GTD)
La categoría de los GT3, dónde participan tanto pilotos profesionales como amateurs. Algunas de las marcas que aquí participan son Lamborghini, Mercedes-AMG, Audi o Aston Martin. Estos vehículos tienen 525 caballos de potencia y pesan un mínimo de 1.245 kilos.
Aspectos clave para ganar
Adelantar
Si a priori el trazado puede resultar sencillo, no lo es. Y es que en Daytona, adelantar es un arte. Aunque las largas rectas pudieran ayudar a adelantar con facilidad, en la práctica un adelantamiento se gestiona en varias vueltas. Se prepara la maniobra, se practica en las siguientes vueltas y se ejecuta en el momento oportuno, muy a menudo al llegar a la chicane o al inicio de las curvas.
La gestión del tráfico
Con más de 50 vehículos en pista, es obvio que hacerse un hueco y evitar el tráfico no es una tarea fácil. Si además le añadimos las banderas amarillas -ya sea por accidente u otras incidencias- ganar o perder está muy relacionado con la gestión del tráfico. Por ello, analizar bien dónde adelantar o cuándo entrar en boxes para cambiar de pilotos son dos decisiones que se basan, en su totalidad, en dónde están los vehículos y evitar meterse en grupo.
Además, el doblar a los otros participantes es también un aspecto clave en la gestión del tráfico. Con cuatro categorías en pista, la competitividad y velocidad de los vehículos será dispar y, por ello, aquellos más punteros deberán buscar el momento idóneo para doblar y salir airoso del gesto. Todo, en una prueba en la que no hay banderas azules, lo que facilitaría el asunto.
Las paradas
Como en toda carrera, el pase por el Pit-Lane es uno de los momentos más críticos. Aquí se puede recuperar ventaja frente a los rivales o, por el contrario, perder un tiempo valioso. A diferencia, por ejemplo de la Fórmula 1, los mecánicos aguardan detrás del muro y saltan al asfalto cuando el vehículo está ya totalmente detenido delante del box.
En la parada participan cuatro mecánicos: uno conecta la manguera de aire comprimido para permitir que se activen los gatos hidráulicos del coche; el segundo se encarga del combustible; los otros dos cambian los neumáticos. Si la parada incluye además el cambio de piloto, un quinto mecánico salta al Pit-Lane y es el encargado de ayudar al piloto que se pone al volante con los cinturones, la radio y el agua.
¿Qué pilotos españoles participan?
La participación de Alonso ha hecho que las 24 Horas de Daytona cobren una importancia carrerística nunca vista en España. Sin embargo, Alonso no será el único piloto español este año… ni ha sido el primero en participar. Antes que él, otros nombres como Jesús Díez Villaroel, María de Villota o Luis Monzón han rodado en esta mítica prueba. Pero, de todos, Antonio García es el rey. Todo un experto en las carreras americanas y en resistencia, García ganó la prueba en la categoría absoluta en 2009, y en 2015 volvió a subir a lo más alto, en esta ocasión en la categoría GTLM.
En este 2018, García buscará un nuevo triunfo en la GTLM poniéndose de nuevo al volante de un Chevrolet Corvette. Junto a él, el nombre que más suena: Alonso. El bicampeón de F1 pilotará el Ligier JS P217 del equipo United Autosport en Prototipos, capitaneado por su jefe de equipo en McLaren, Zak Brown. También en la categoría absoluta, Daniel Juncadella se pondrá al volante del Oreca 07 LMP2 del equipo Jackie Chan DC Racing. En cambio, Miguel Molina competirá en la GT Daytona con un Ferrari 488 GTE del equipo Risi Competizione.
El Hall of Fame
En las 24 Horas de Daytona han participado -y siguen participando- pilotos de gran renombre. Procedentes de casi todas las categorías destacables del automovilismo, la lista de Daytona es amplia. Entre los que ya saben qué es ganar aquí, Juan Pablo Montoya y Sebastien Bourdais.
Como máximos ganadores de la prueba encontramos a los americanos Hurley Haywood y Scott Pruett con cinco triunfos cada uno. Les siguen Pedro Rodríguez, Bob Wollek, Peter Gregg y Rolf Stommelen con cuatro victorias. Junto a ellos, otros nombres conocidos han ganado en más de una ocasión como Scott Dixon, Christian Fittipaldi, Mauro Baldi o Memo Rojas.
¿Y si hablamos de marcas? Entonces, una destaca sobre las demás: Porsche. El fabricante alemán ha ganado la prueba en 18 ocasiones aunque, desde hace siete años, los germanos no suben a lo más alto del podio. ¿Será éste el año de un nuevo triunfo?