Sexto. Ocho puntos. Primeros guarismos para su casillero. Sí, hablamos de Fernando Alonso. En el Gran Premio de Rusia el bicampeón ha sumado sus primeros puntos de la temporada, en una carrera que se le puso de cara desde la primera curva gracias a su remontada en la salida y la melé que se lió en los primeros compases de la carrera. Sea como fuere, por primera vez desde hace casi un año el McLaren ha dado señales de competitividad y ha llevado al asturiano a cruzar la meta como el sexto clasificado.
Después de un inicio de temporada complicado -dramático accidente en Australia y baja en Baréin-, Alonso se ha quitado la espinita que se clavó en China al quedarse a las puertas del Top 10. En Rusia, la historia ha cambiado y su casillero ya luce con orgullo los primeros dígitos del año: ocho puntos que saben a victoria. Y no es para menos. La sexta plaza en Sochi se convierte en el segundo mejor resultado del bicampeón en el último año y medio. La segunda mejor carrera del español al volante del McLaren-Honda. El sexto puesto es, de momento, a lo máximo que pueden aspirar Alonso y la escudería británica. Mucho para la grave situación de rendimiento que atraviesan. Poco, muy poco, para dos campeones como son piloto y equipo.
Lo dice él, lo repite Jenson Button e insisten desde Woking: puntuar ha de ser el objetivo regular. Pero es que entrar en los puntos no está siendo tarea tan sencilla como sí lo es decirlo. El motor Honda no acaba de hacer despegar al MP4-31 con un rendimiento inferior al esperado del binomio de los 80 y un consumo superior de combustible. Aunque poco a poco, el V6 japonés da pinceladas de mejoría en potencia y fiabilidad. Y eso se nota en todo el conjunto. El monoplaza gana en velocidad y, de cara a los próximos Grandes Premios de Barcelona y Mónaco, el chasis y la aerodinámica priman por encima del motor. Así, las expectativas son altas: volver a puntuar debería ser asequible para Alonso y Button en las próximas dos citas.
Más allá de lo que deparará el futuro, el bicampeón se marcha de Rusia sonriente y positivo. Optimista por el comportamiento del MP4-31 en Sochi y su propio rendimiento al volante de la máquina. Pero consciente de que la sexta posición no es, ni de lejos, a lo máximo a que puede aspirar en McLaren, Ni él, ni Button ni la propia formación. De momento, el primer paso ya se ha dado en Rusia. Ahora queda seguir avanzando.