Cae la noche y los motores rugen. El brillo de la luna se ve eclipsado por los más de 1.500 paneles luminosos que encienden y electrifican un trazado único en el mundo. En pocos sitios como en este el ambiente nocturno cobra tanta vida en el asfalto. Sí, hablamos de Singapur. El Gran Premio fetiche de los aficionados a las pruebas bajo focos artificiales pero con emoción natural.
Más allá del espectáculo de luces y sombras, colores vibrantes y viseras que permiten seguir la mirada de los pilotos, Singapur es mucho más que un fin de semana de carreras. País de espíritu joven y multicultural, esta ciudad-estado del Sudeste asiático esconde joyas y curiosidades que conocerás en menos de 10 minutos. ¿Preparado para viajar hasta la ‘ciudad del león’? ¿A punto para descubrir qué hacer y ver en Singapur? ¡Agárrate, que vienen curvas!
1- Singapur es el país más pequeño del Sudeste asiático, con una superficie de 684 km2. Aún así hay 50 países en el mundo más pequeños que ésta ciudad-estado.
2- El país está formado por 63 islas, de mayor y menor tamaño y atractivo. Obviamente la isla principal es Singapur. Pero es en las más pequeñas dónde irás para tumbarte al sol o adentrarte en reservas naturales.
3- Los primeros registros históricos que se tienen de Singapur datan del Siglo II. Desde 1800 y dada su situación estratégica en el Sudeste asiático, pasó a ser colonia británica para favorecer los intereses comerciales de la corona. Tras ser invadidos por los japoneses en la Segunda Guerra Mundial, el país proclamó un autogobierno. Posteriormente se integró en Malasia y, finalmente, en 1965 se independizó totalmente. Nació la República de Singapur. Una república de tan solo 51 años.
4- ¿De dónde procede el nombre ‘Singapur’? Todo apunta al Siglo XIV cuando el príncipe de Srivijaya habría visto aquí un león (aunque era territorio ocupado por tigres). Después de este encuentro, esta zona adquirió el nombre de Singapur por las palabras en sánscrito ‘singa’ (león) y ‘pura’ (ciudad).
5- Más allá de sus imponentes rascacielos y su iluminación cuando cae el sol, Singapur destaca por ser una de las ciudades más limpias. Tan impecable está todo que, incluso, no se venden chicles. ¿Por qué? Por ‘miedo’ a que la gente caiga en la tentación de tirarlos al suelo. Igual que aquí, ¿verdad?
6- No hay imagen ni postal de Singapur en la que no se vea el Marina Bay Sands. Este grandioso complejo no deja a nadie indiferente. Y no sólo por su solemne arquitectura… Aquí encuentras el Marina Bay Sands Hotel, el Sands Sky Park, el ArtScience Museum, teatros, el gran casino, Crystal Pavillions, Event Plaza… Ahí es nada, ¿eh?
7- Esta ciudad-estado es mucho más que las intensas y atractivas luces del Marina Bay cuando cae la noche, y también de día. Los Jardines Botánicos, Chinatown, Little India, el Business District y, por supuesto, Singapore Flyer (rememorando el London Eye) son varios de los puntos de interés que no puedes perderte.
8- El Merlion es la imagen de Singapur; mitad pez y mitad león. Cómo bien habrás imaginado, representa al león que vio el príncipe Srivijaya, mientras que la cola de pez hace referencia al pasado pesquero de la ciudad. El Merlion tiene una estatua de 37 metros de altura y expulsa agua por la boca, situado en Merlion Park. Vamos, la imagen que todo visitante debe fotografiar.
9- Desde Singapur puedes llegar fácilmente a Malasia ya que se encuentran en la misma península y el transporte por tierra es rápido. ¿Te pica el gusanillo de la competición? ¡Síguelo! El circuito de Sepang está a tan sólo 4 horas en coche. Y además, siempre puedes aprovechar para hacer una escapada de un par de días y conocer Kuala Lumpur. De rascacielo a rascacielo.
10- El Marina Bay Street Circuit es el trazado con más curvas de todo el Mundial: con ¡23! Precisamente el último giro es el más rápido ya que los monoplazas llegan a alcanzar los 200 km/h. La velocidad, la humedad y la cercanía de los muros y barreras hacen que el coche de seguridad haya aparecido en al menos una ocasión en todos los Grandes Premios disputados.